La seguridad de la comunidad educativa es una prioridad fundamental en el colegio Gimnasio Campestre La Fontana, y los simulacros de evacuación son una herramienta fundamental para preparar a la comunidad educativa en caso de una emergencia. En el caso de este colegio que abarca varios ciclos de formación desde el preescolar, la primaria y el bachillerato internacional, la organización y ejecución de un simulacro de evacuación tipo 1 debe adaptarse a la necesidades y capacidades de cada grupo de edad. A continuación se detallan los pasos clave a seguir para llevar a cabo el simulacro de evacuación en este contexto.
ORGANIZACIÓN DEL SIMULACRO. Es fundamental conformar un equipo de trabajo, encargado de planificar el simulacro definiendo roles y responsabilidades claras para el personal docente, administrativo y de apoyo como las brigadas de evacuación, primeros auxilios, contra incendios y el equipo de brigadistas representantes de cada grado.
EVALUACIÓN DE RIESGOS. Identificar las posibles amenazas y riesgos específicos que puedan afectar la seguridad de la comunidad educativa del colegio Gimnasio Campestre La Fontana, considerando fenómenos de riesgo que pueden ser de origen natural como sismos, inundaciones, incendio forestal. Y también pueden ser de origen técnico como incendio, intoxicación por ingestión de alimentos y accidentes.
COMUNICACIÓN. Informar y preparar a toda la comunidad educativa sobre las rutas de evacuación a seguir desde las diferentes dependencias del colegio hasta llegar a los puntos de encuentro, fecha y hora del simulacro, así como los protocolos que se deben seguir antes, durante y después de una situación de riesgo como el sismo.
CAPACITACIÓN PREVIA. Brindar las capacitaciones necesarias a los docentes de las diferentes jornadas académicas y de escuelas de formación, así como a los estudiantes sobre las situaciones de riesgo que pueden ocurrir en el colegio, los protocolos de seguridad ante estas situaciones, las rutas de evacuación y los puntos de encuentro.
Figura 1
Capacitación a estudiantes
Figura 2
Capacitación a docentes - Escuelas de formación
Fuente: Elaboración propia.
EJECUCIÓN DEL SIMULACRO
INICIO DEL SIMULACRO. Activar la alarma audible para indicar el inicio del ejercicio, asegurando que toda la comunidad educativa esté al tanto de que se trata de un simulacro.
EVACUACIÓN ORDENADA. Los líderes brigadistas de cada grado junto con el docente encargado guían al grupo de acuerdo a los niveles educativos y asegurando que se cumpla con el protocolo de evacuación.
Figura 3
Ubicación ordenada por niveles previamente al simulacro
Fuente: Elaboración propia.
3. VERIFICACIÓN DE ÁREAS SEGURAS. Una vez realizada la evacuación con el apoyo de la brigada se realiza la verificación de que todos los estudiantes estén presentes en los puntos de encuentro designados y realizar un conteo con el objetivo de asegurar la integridad de cada uno de los grupos que conforman los tres ciclos educativos del colegio.
Figura 4
Estudiantes en los puntos de encuentro designados
Figura 5
Verificación de los estudiantes en los puntos de encuentro designados
Fuente: Elaboración propia.
Figura 6
Verificación de los estudiantes en los puntos de encuentro designados
Figura 7
Verificación de los estudiantes en los puntos de encuentro designados
Fuente: Elaboración propia.
Figura 8
Verificación de los estudiantes en los puntos de encuentro designados.
Figura 9
Verificación y evacuación de todos los visitantes a los puntos de encuentro designados
Fuente: Elaboración propia.
4. EVALUACIÓN POST-SIMULACRO. Realizar una revisión detallada del desempeño durante el simulacro, identificando áreas de mejora y fortaleciendo los procedimientos necesarios para una próxima evacuación efectiva en los siguientes simulacros o cuando se presente una situación real.
Para concluir, la organización y ejecución del simulacro de evacuación tipo 1 en el colegio Gimnasio Campestre La Fontana, el cual está conformado por los tres niveles de formación desde el preescolar hasta el bachillerato internacional se requiere de una planificación detallada, comunicación asertiva y capacitación adecuada para garantizar la seguridad y preparación ante posibles emergencias. Mediante la práctica regular de estos ejercicios, se fortalece la cultura de prevención y se fomenta un ambiente escolar seguro para todos los miembros de la comunidad educativa.