"Don't Be a Punk, Place Your Junk". Cuando la comunidad GCF se convierte en guardiana del medio ambiente.
- GCF NEWS MAGAZINE SCHOOL
- 24 mar
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El Proyecto Ambiental Escolar (PRAE) llevó a cabo con gran éxito la actividad "Don't Be a Punk, Place Your Junk", una jornada dinámica y educativa que buscó fomentar la correcta separación de residuos entre los estudiantes. La actividad se desarrolló en tres categorías, adaptadas a los distintos niveles escolares, asegurando que cada grupo aprendiera de manera divertida y significativa.
Primera categoría: Primero a tercero
Este grupo inició la jornada con el cuento "Los Súper Recicladores y el Planeta Limpio" narrado por los Environmental Guardians, una historia que capturó su atención y los motivó a convertirse en héroes del reciclaje. Luego, participaron en el emocionante Juego de Clasificación. Con tres grandes contenedores de colores (verde para orgánicos, blanco para reciclables y negro para no reciclables), los estudiantes corrieron para colocar tarjetas con imágenes de residuos en el contenedor correcto. Cada acierto fue celebrado con aplausos y sonrisas. Finalizaron la actividad con una canción divertida acerca de la separación de residuos.
Segunda categoría: Grados 4 a 6
Aquí la dinámica subió de nivel con una competencia por casas: Chigüiros, Guios, Cachicamos, Jaguares, Corocoras, Cachirres, Venados y Araguatos. Cada equipo debía clasificar correctamente los residuos en el menor tiempo posible. La actividad fue supervisada por profesores y Environmental Guardians, quienes se aseguraron de que los residuos fueran depositados en la caneca correcta. Si un residuo se colocaba mal, el equipo debía corregirlo antes de continuar. La emoción y la energía de la competencia, acompañada de música ambiental, mantuvo a todos motivados.
Tercera categoría: Grados 7 a 11
Los estudiantes mayores enfrentaron un desafío más complejo, recorriendo tres estaciones interactivas. En la primera, tomaban una tarjeta de residuos. En la segunda, decidían en qué caneca depositarla según el tipo de residuo. Si se equivocaban, regresaban al inicio, si acertaban, avanzaban a la siguiente. En la tercera estación, los que clasificaron correctamente debían seleccionar la opción adecuada para la disposición final: compost, relleno sanitario o planta de reciclaje. La casa ganadora fue quien logró ubicar todas las tarjetas de residuos en su lugar de separación y destino final correspondiente en el menor tiempo posible. Al final, celebraron su logro y la jornada concluyó con una reflexión colectiva y la creación de compromisos ecológicos por casa.
Un cierre lleno de aprendizaje y compromiso
La jornada “Don’t Be a Punk, Place Your Junk” fue un rotundo éxito. Los estudiantes, desde los más pequeños hasta los mayores, aprendieron de forma práctica y divertida cómo separar los residuos. Más allá de la competencia y la música que animó el ambiente, el verdadero triunfo fue ver a todos los participantes comprometidos con el cuidado del medio ambiente.
La actividad dejó una huella positiva en la comunidad escolar, mostrando que, con educación y creatividad, podemos formar ciudadanos más conscientes y responsables con nuestro planeta.
Liderado por el Proyecto Ambiental Escolar (PRAE)
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